Dos curiosidades del Palacio Real

Dos curiosidades del Palacio Real

En el paseo por la historia de hoy, te descubro dos curiosidades del Palacio Real.

¿Estás preparado? Vamos, que entramos en la sede oficial del rey de España.

La primera de las dos paradas es el salón de columnas.

Un salón que debe su nombre a la colección de columnas que soportan sus paredes. En su origen, se empleaba como salón de bailes y de funciones. En lo que respecta a las ceremonias civiles de la corte sólo lo ha superado en importancia el salón del trono.

Fue Carlos IV quien trasladó aquí el salón de baile, convirtiéndose en escenario de banquetes y fiestas cortesanas. Unos eventos que eran tanto de diversión como de ceremonia.

Por ejemplo, cada Jueves Santo, el rey lavaba los pies y servía la cena a doce pobres que simbolizaban a los Apóstoles, ante toda la corte que presenciaba la escena. El lavatorio, que era una costumbre piadosa que llevaban a cabo otros monarcas europeos además del español, incluso hoy el papa sigue haciéndolo, se extendió hasta el reinado de Alfonso XIII. Hay que decir que ni Juan Carlos I ni Felipe VI han continuado con esta tradición. Entre las costumbres rescatadas de la vieja monarquía, esta quedó en el olvido.

Fue el rey Alfonso XII quien inauguró un salón específicamente destinado a bailes y comidas de gala. De este modo, el salón de columnas quedó dedicado sólo a los acontecimientos más formales; por ejemplo, en él se expuso el cadáver de la reina Mercedes, primera esposa de Alfonso XII, o se firmó el tratado de adhesión de España a la Unión Europea en 1985. Esta firma se llevó a cabo sobre la monumental y famosa mesa de las esfinges.

En la actualidad, en este salón se ofreció el aperitivo de la boda de los entonces príncipes de Asturias. Un ágape que tuvo lugar por las principales estancias de la primera planta del palacio entre las que destacan el salón de columnas y el comedor de gala.

Para la segunda de las dos curiosidades del Palacio Real debemos salir de palacio por una puerta secreta: el túnel Bonaparte.

Quien asegura que Madrid es una ciudad hueca, no falta a la verdad y no sólo en cuanto al entramado de la red del metro se refiere. Hay otro motivo por el que se podría caminar por Madrid sin necesidad de pisar la calle.

Y esto es así, porque desde el Palacio Real salen un gran número de túneles secretos realizados para que los monarcas pudieran abandonarlo en caso de peligro. Bueno, por seguridad y por discreción también. Una de las historias más fascinantes es la que acompaña al túnel que va hasta el monasterio de la Encarnación. Dice la leyenda que allí acudía Felipe IV en góndola, a través de uno de los pasadizos que estaba inundado. Y no lo hacía por devoción, sino para tener encuentros amorosos con una novicia de clausura.

Por supuesto, esto no está documentado, sólo se trata de una leyenda maliciosa con las que gusta aderezar la vida de los royals.

De lo que sí que tenemos constancia es de uno de los túneles más famosos, el conocido como túnel de Bonaparte. Manolo G. Sanahuja, escritor especialista en Madrid, nos dice en su último libro «Lo que pasa en Madrid…¡Se queda en Madrid!» que este túnel va desde el Palacio Real hasta el palacio de Vargas en la Casa de Campo atravesando el Paseo de la Virgen del Puerto y Madrid Río. Se llama Bonaparte porque lo mandó construir el rey José I Bonaparte, hermano de Napoleón, durante su reinado en España.

Dice Sanahuja así en el capítulo 12: «Este rey francés, odiado por el pueblo de Madrid y de España en general, por seguridad, decidió no vivir en el palacio Real y prefirió hacerlo en el de los Vargas. (…) Para evitar cualquier ataque a su persona, ordenó construir también un pasadizo subterráneo que comunicase su vivienda con el palacio Real. (…) El pasadizo fue utilizado como almacén de municiones y refugio ante los bombardeos durante la Guerra Civil».

Además, por este túnel salió Alfonso XIII rumbo al exilio cuando se proclamó la II República para evitar a los manifestantes que se agolpaban en la puerta de palacio. Sin embargo, aunque esta teoría está tan extendida que ya no se pone en duda, el historiador Sancho Gaspar asegura que no tenemos pruebas de ello.

Si hablamos de esta puerta secreta en la actualidad, muy probablemente es la que haya utilizado la familia real para acceder a los jardines del Campo del Moro sin ser vistos en mayo de 2024. Allí se llevó a cabo la sesión de fotos con la que celebraron sus veinte años de matrimonio.

Estas son sólo dos curiosidades del Palacio Real de Madrid. Un palacio con mucha historia plagada de historias.

Suscríbete y recibe cada semana el artículo en tu correo. Recuerda que también me puedes escuchar en YouTube o Spotify.

Formulario de inscripción
Loading

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies